Si no apareces como toca, no existes, nadie te conoce y en consecuencia, tampoco te compran.
No es ciencia de cohetes, es cuestión de estadística.
Mientras mayor cantidad de potenciales clientes impactes, más probabilidades tienes de convencer a las personas de elegir tus productos o servicios. Posicionar tu empresa en los primeros lugares de un buscador como Google marca, sin duda alguna, una gran diferencia.